viernes , abril 19 2024
Inicio / Editorial / Argentina y los presidentes mentirosos
Mentir repetidamente puede ser señal de soledad de poder. Son los síntomas del Síndrome del sillón vacío.

Argentina y los presidentes mentirosos

A Mauricio Macri, tuve la oportunidad de entrevistarlo al entonces candidato por el espacio político Cambiemos, y en aquella oportunidad la sensación fue que solo era un hombre de negocios. La nota periodística, resultó un manual de un catálogo de promesas  y tic marketineros.

Claro, el latiguillo era la baja de retenciones, tenemos el mejor equipo, no al impuesto a las ganancias eran las principales apuestas del ahora presidente Macri. Hoy en día el discurso es retórico.

En aquella ocasión Mauricio Macri mintió ante miles de personas. No había plan económico.  La jurisprudencia mediática es el caso de la reactivación de Fabricaciones Militares. Pasaron casi tres años y el final del camino es diferente a lo anunciado por el actual presidente, eso sí el cuento es reiterativo: estamos analizando.

PSICOLOGÍA NAZI

En la memoria recurrí, a la cultura alemana cuando se buscaba como engañar a grandes masas. Y Joseph Goebbels, sostenía que  la frase “una mentira repetida mil veces se convierte en verdad”. No hay evidencia certera de que haya sido su autor, pero definitivamente sí es una buena síntesis de lo que este propagandista hizo durante la Segunda Guerra Mundial. Tan eficaz fue su labor, que incluso hoy en día hay quienes todavía defienden las “verdades” del Tercer Reich.

Mauricio Macri, como líder de un espacio político se miente a él mismo, miente a sus pares y miente a la mayoría del pueblo argentino. El relato de mentir repetidamente tiene una base en la labor de Goebbels, que bien puede decirse que sus mecanismos han sido copiados reiterativamente por muchos líderes del mundo.

Sectores poderosos siguen valiéndose de manera consciente de la mentira como medio para manipular las mentes de las personas sobre las que quieren influir y así lograr que acepten lo inaceptable y secunden planes que siguen el interés de unos pocos.

Los grandes sectores de poder se dieron cuenta, gracias a la experiencia nazi, de que las sociedades eran capaces de creer en cualquier mensaje si este era presentado de la manera adecuada. Solo había que ejercer un control absoluto sobre los medios de comunicación social y todas aquellas instituciones que transmitieran ideología, entre ellas, la escuela. Bastaba con hurgar en los miedos, los odios y las inseguridades. Luego construir una “verdad” conveniente y repetirla hasta la saciedad.

Las  frases recurrentes de los  expresidentes como Menem, al pronunciar seguidamente en su presidencia, que no hubo corrupción, o Néstor Kichner; con su frase: quiero liberar al país de la corrupción y devolver nuestro entorno económico o Cristina Fernández decir: ¿Son se hacen o se piensan que somos estúpidos?. Demasiadas coincidencias en la teoría del alemán  Goebbels.

Macri, no se cansa de decir que vamos bien, o tranquilos.  Una y otra vez los presidentes mienten, y mienten porque es la única forma que tienen de esconder la verdad.

Según una biblioteca de la psicología, Lo que ocurre con la repetición es que genera creencias muy profundas. Cuando el cerebro capta una situación nueva, hay un desequilibrio, al que sigue una asimilación, una acomodación y luego una adaptación. Como cuando llegamos a una ciudad que no conocemos y en principio nos sentimos desubicados, pero poco a poco, de tanto ver los mismos lugares, nos vamos familiarizando hasta que nos apropiamos del nuevo entorno. De hecho, vamos haciendo una especie de mapa propio a partir de lo que conocemos.

Con la mentira repetida ocurre algo similar. La mente se va adaptando para escucharla, para percibirla y termina incorporándola a su ámbito de pensamiento. Es lo familiar, lo conocido, lo que todo el mundo afirma.

Definitivamente los más mentirosos son nuestros líderes políticos.

 

Justo Dagorret

Acerca de Redacción

Check Also

Miserias políticas

EDITORIAL / La política es la única herramienta para transformar la realidad, indican la  mayoría …

Un comentario

  1. Nunca te streviste a decir ésto del relato K que prendió e el 35% de uestros ciudadanos

El Ojo Web
error: Contenido protegido