La discusión del contrato del agua debería darse en el Concejo Deliberante

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RÍO TERCERO// SERVICIO PÚBLICO// Nota opinión por Mercedes Coquet, concejal del bloque Juntos por la Ciudad.

El Ejecutivo Municipal y la Cooperativa de Obras y Servicios públicos, han llegado finalmente a un acuerdo para la celebración del nuevo contrato de concesión del servicio público de suministro de agua potable y saneamiento cloacal.

Este hecho pone fin a muchos años de incertidumbre y fragilidad jurídica, y debe generar en todos los que formamos parte el gobierno de la ciudad un análisis profundo sobre las causas que generaron esta injustificada demora.

¿Quién o quiénes son los responsables? ¿Por qué razón cuesta tanto llegar a acuerdos positivos para la ciudad?

 

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Este contrato debe ser aprobado por el Concejo Deliberante. En este sentido, es importante decir que los concejales de la minoría no hemos tenido ningún contacto con los funcionarios del ejecutivo para conocer los términos de las negociaciones llevadas a cabo, nueva demostración de la falta de vocación republicana de la actual administración. Por el contrario, la Cooperativa de Obras y Servicios Púbicos demostró una gran apertura y disposición en este sentido.

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Son muchas las cuestiones que necesitamos conocer sobre este nuevo contrato, pero la tarea se complica por esta falta de apertura democrática y el nulo tratamiento, hasta el momento, en las comisiones de trabajo del Concejo Deliberante.

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Otro aspecto que continúa entorpeciendo un desarrollo armónico y previsible de nuestra ciudad es la falta de visión de futuro, es pensar qué ciudad queremos, planificación urbana imprescindible para que las obras de infraestructura lleguen cuando sean necesarias. Este contrato tiene mucho que ver con las obras. Se expresa en el proyecto un PMOES (plan de mejoras para la optimización y expansión del servicio). Este plan exige una planificación previa, a la fecha inexistente.

Con cada lectura surgen nuevos interrogantes: Cómo se definió la propiedad de los bienes actuales y las implicancias que esto tiene, cómo se llega al porcentaje definido del canon que deberá pagar la Cooperativa y que muy probablemente se traslade al precio, cómo funcionará y cuál será el costo de funcionamiento del ente de control, qué autocrítica realizó el Estado Municipal en cuanto al funcionamiento del Concejo Auditor de Servicios Públicos y del Ente de Control de Servicios Públicos.

Estamos ante un gran desafío. La administración municipal debe estar a la altura, generar sus propios parámetros, publicar toda la información, e iniciar un proceso de modernización que la torne eficiente, transparente y abierta.